Los tratamientos consisten, básicamente, en deshabituar al organismo de sustancias desequilibrantes como pueden ser los azúcares, lácteos, gluten, estimulantes etc, y a partir de ahí encontrar el tipo de alimentación más adecuada para cada persona. Para apoyar este proceso se recomienda el uso de suplementos (principios activos, vitaminas, minerales, aminoácidos y ácidos grasos esenciales), siempre en función de las deficiencias nutricionales que presente cada cliente.

El tratamiento no trabaja el síntoma ni la enfermedad sino a la persona en su conjunto. El éxito del Metodo Dharma, está en respetar la individualidad bioquímica de cada cliente. Por eso, no existen dos tratamientos iguales.

El tiempo que dura el proceso también depende de la persona, del tiempo que lleve con la enfermedad y el tipo de circunstancias, pero suele durar meses, como cualquier otro tratamiento,  (raramente, menos de 3), ya que el organismo necesita tiempo para asimilar los nuevos hábitos y su nueva forma de funcionar. Las citas se suelen realizar de entre 15 días a 5-7 semanas, dependiendo de la situación o procedimiento.

Al principio del tratamiento es normal experimentar un empeoramiento de los síntomas. Es lo que se conoce como síndrome de abstinencia y de desintoxicación. Cada persona vive este proceso de forma personal: las hay que se sienten mal durante los primeros días y después la mejoría comienza a ser notable; otras, al principio no sienten nada y es al cabo de varias semanas cuando comienzan a notar cambios; también, hay muchos casos de personas que comienzan a encontrarse bien directamente, sin tener que pasar por este proceso.

El objetivo del Método Dharma no sólo se basa en solucionar los problemas de salud de la persona sino ayudarle a vivir más en sintonía consigo misma y más feliz. 

Estarás de acuerdo conmigo que ésto es lo mejor! :)